![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBg5A943w-JaGcA6Y6F2og-p0Aw5UpKqWC8jdsIogXxR7If9dc-cT4qOgkwxYHrTUbzNczuTzKcMUhbkzkVu4dI8QbLBL2_DYWCegiMczpA-6P2lfyDh6RRYxq8kBeXGziolBLAVSmGPxZ/s320/hormigas.jpg)
Por mas que muchos intenten mantener el aspecto de una cucaracha, o hablar como gorila, y hasta discutir como paloma, la posibilidad de ser hormiga es muy limitada.
Cuando conseguían tener antenas, de inmediato una trompa atravesaba sus caras, y si alguna vez diminutaban como negros trabajadores, enseguida eran reyes de la selva.
No todos cuentan con la exacta esencia de hormiguear: tres pasos al sol, todo un oro verde sin lamer, y conservar hasta el día final la fidelidad terrestre, el corazón pequeño, y el plan perfecto de invasión.