viernes, 27 de diciembre de 2013

Onírico 1

[Un Dios te encerró en el Templo, y nunca más pudiste salir con el mismo cuerpo]

Para conocer tu forma de radiante bestia
y sentirme espuma de tu boca azul
Debo cruzar la línea que me atraviesa de fondo
y completarme a lágrima
y ardor.
No jurar jamás por los recién nacidos,
benditos, culpables, vacíos
y arrodillarme sucia frente al Dioserror.
Temblar,
roer,
amar,
cantar en la entrada del pueblo
y desangrar mi garganta
hasta evaporar.

domingo, 1 de diciembre de 2013

De otras guerras


La eterna desesperación del gritón enmudecido, la fastidiosa prueba del sobreviviente.
María recibió el temido llamado, no habían pasado sino cinco minutos de la hora acordada y del día dispuesto. El aire también rajó su vientre frente a los insistentes alaridos del teléfono. Toda la atmósfera perecía estar invadida del sonido inescrupuloso, asaltante, sangriento.
No quería atender el llamado, alargó la espera aunque el cuchillazo en su estómago la dejara sin aire. Tenía la esperanza del cansancio, de la mujer que puede desaparecer incluso aunque alguien la nombre, la invoque. 
Verdaderamente, no quería atender el llamado. Decir las crueles palabras de bienvenida al diálogo, iniciar el ritual de la invanción por palabras. Sentía que una parte de sí misma desaparecería en el organismo del otro, y peor aún, que una parte del otro se metería en su cuerpo contagiándola de minúsculas, pero poderosas, guerras internas.
Ya no podía eludir los gritos del teléfono, vaciarse de pautas sociales conllevaría el abandono de otras que no estaba dispuesta abandonar. 
Atiende el llamado: se prepara para la danza del guerrero amaestrado.

#MIRACÓMONOSPONEMOS

Mirá cómo nos ponemos me pongo la voz entera no dejo que quiebren mi testimonio Me pongo las uñas y los dientes me pongo el dolor que tr...